David "Mietek" Pemper (1920-2011) - Héroe en el infierno Imprimir
Lunes 27 de Junio de 2011 06:09
Mietek PemperSu engaño a los nazis permitió las listas de Schindler

Murió el pasado día 7 de junio, tenía 91 años, era judío y gracias a Steven Spielberg parte de su vida es historia, pues contó su hazaña después de que el cineasta rodara su célebre Lista de Schindler . Mieczyslaw Pemper, más conocido por Mietek, murió en Augsbourg, en el sur de Alemania, donde residía con la suerte de haber sobrevivido a la solución final y el honor de haber contribuido a salvar al menos a 1.200 personas de una muerte segura en uno de los campos de exterminio nazis de Polonia.

También le cabía la satisfacción de haber sido el testigo de cargo que condenó a muerte, en 1946, a Amon Goeth, el psicópata capitán de las SS, jefe del campo de concentración de Plaszow, que el actor Ralph Fiennes interpreta en la citada película de Spielberg. Aquel tipo que se divertía matando después de desayunar, disparando con su rifle desde el balcón de su residencia en el campo. Mietek fue el que lo contó.

Contribuyó a salvar al menos a 1.200 judíos, a los que dio como "aptos para el trabajo"

Mietek era apenas reconocido cuando se le nombraba y es fácil confundirlo con Izhak Stern, el contable, mano derecha y casi voz de la conciencia del empresario alemán Oskar Schindler, quien, a riesgo de su vida, utilizó la posibilidad que daba el régimen nazi de usar mano de obra esclava en las factorías, para salvar a los judíos que Mietek, desde su posición de escribiente para el desalmado Amon Goeth, daba como aptos para el trabajo.

Mietek, que nació el 24 de marzo del año 1920 en Podgórze y que estuvo confinado en el gueto de Cracovia, fue traslado en marzo de 1943 al campo donde permaneció preso hasta septiembre de 1944. Sucedió que el malvado jefe del campo lo utilizó de secretario eventual, con tal suerte que gracias a ello pudo leer documentos que contenían instrucciones de Berlín sobre el modo de proceder con los judíos: los fuertes y sanos -mientras lo estuvieran- los usarían para trabajar, y el resto, niños, personas débiles, enfermas o viejas, serían exterminados. Mietek falseó los datos y en connivencia con Stern y Schindler confeccionaron las listas que salvaron a 1.200 seres humanos.

Por: Eduardo Martín de Pozuelo

Fuente: La Vanguardia (16/6/2011)